En un mundo cada vez más digital, los ciberataques siguen evolucionando. Este 2025, los más comunes y peligrosos siguen siendo los clásicos… pero más sofisticados. Aquí te explicamos brevemente los principales tipos:
Phishing
Consiste en engañar al usuario para robarle información personal (como contraseñas o datos bancarios) mediante correos o mensajes falsos que imitan empresas legítimas.
Ejemplo: un correo de “tu banco” pidiendo verificar tu cuenta.
Ransomware
Este malware secuestra tus archivos y exige un pago (ransom) para liberarlos.
Hoy en día, incluso las copias en la nube pueden verse afectadas si no están bien configuradas.
DDoS (Denegación de Servicio Distribuido)
Ataques masivos que saturan un servidor o red, dejando fuera de línea sitios web o servicios.
Suelen usarse contra empresas, gobiernos o servicios financieros.
MitM (Man-in-the-Middle)
El atacante intercepta la comunicación entre dos partes, robando o alterando la información transmitida.
Sucede comúnmente en redes Wi-Fi públicas sin protección.
SQL Injection
Los atacantes inyectan comandos maliciosos en bases de datos a través de formularios web vulnerables.
Permite robar o modificar información confidencial.
CSS (Cross-Site Scripting)
Se aprovecha de sitios web inseguros para inyectar código malicioso que roba cookies o credenciales de usuarios.
Afecta tanto a usuarios como a desarrolladores que no validan correctamente los datos.
Exploits 0-Day
Son ataques que aprovechan vulnerabilidades desconocidas (sin parchear) en software o sistemas.
Altamente peligrosos, porque ni los fabricantes conocen aún el fallo.
Suplantación DNS
El atacante redirecciona al usuario hacia sitios falsos modificando los registros DNS.
Crees que entras a tu banco… pero terminas en una copia falsa.
Cómo Protegerte de Todos
- Actualiza tu software y sistema operativo: los parches corrigen vulnerabilidades.
- Usa contraseñas fuertes y únicas, con autenticación multifactor (MFA).
- Desconfía de correos o enlaces sospechosos.
- Evita redes Wi-Fi públicas o usa una VPN segura.
- Haz copias de seguridad en medios externos o nubes confiables.
- Instala antivirus y firewall actualizados.
- Educa a tus hijos, familia y compañeros de trabajo: el factor humano sigue siendo el eslabón más débil.
Así que… ya sabes!
La ciberseguridad no depende solo de la tecnología, sino también de la conciencia y la prevención. Con conocimiento y buenas prácticas, puedes reducir drásticamente el riesgo de caer en un ataque.
Si necesitas ayuda sobre como implementar un plan de concientización, contáctanos y con gusto te apoyaremos
No olvides compartir con amigos y familiares para que estén enterados de las principales formas de ataques cibernéticos que han seguido estando presentes este 2025 y que sin duda, seguirán estando por años.